domingo, 17 de julio de 2022

Juicio controvertido

Dentro de mi mente tengo una lucha,

una conflagración, una contienda,

espero por mi bien que no se extienda,

y a Dios le pido, si es que me escucha,


que si hay pendencia, que no sea mucha,

y si hay necesidad, tome la rienda,

que al menos procure, que no trascienda,

o que sea breve y sea flojucha.


Alguna que otra vez me ha sucedido,

tener un altercado, igual que este,

estar en mi interior, tan dividido,


y no existe cosa que más moleste,

que tener un juicio controvertido,

y seas tu mismo quien te conteste.

Hoy partiré por mucho que me duela



Hoy partiré por mucho que me duela,

que si fuiste toda la vida mía,

anoche no te hallé, ya no dormía,

perdida la razón y mi alma en vela.


No se si seguiré alguna estela,

que eras mi luz, yo siempre presumía,

pero anteayer, pasó lo que temía:

Llegamos al final de esta novela.


No puedo aplacar el dolor que tengo,

se que está forjando mi muerte en vida,

podría recurrir, aunque me abstengo,


a darme abiertamente a la bebida,

si ello sucediera, ya te prevengo,

será porque no tengo otra salida.

Ese pájaro que trina


 Ese pájaro que trina,

mientras labora su nido,

emite alegre el sonido,

de un canto de golondrina.


Cuando esa ave peregrina,

ya tiene su hogar construido,

bajo un alero escondido,

lanza su voz cantarina.


Vuela alto como el vencejo,

con su cola ahorquillada,

y metálico reflejo


azul, en negro tallada,

hace un grácil manejo,

de su silueta alargada.


domingo, 10 de julio de 2022

Ayer llené mi alma de esperanza


 Ayer llené mi alma de esperanza,

no quise sucumbir a la derrota,

por un amor que, sin cesar, se agota,

negaré que aquello fue tu venganza.


Como rescate, daría fianza,

para no ver de nuevo, mi alma rota,

ni ese dolor que tu mirada explota,

pues aunque te diera el cielo, no alcanza.


Ambos fuimos siervos de la rutina,

y repetimos errores del pasado,

cayendo en el hastío que fue ruina,


por la apatía de un amor cansado,

con esa indolencia que determina,

el cruel final del amor agostado.

Amantes peregrinos



 Esta larga senda que transitamos,

se hace llana, siendo el amor destino,

recorrerla con afán peregrino,

si de lo mundano nos despojamos.


Somos caminantes, si caminamos,

y disfrutamos del gozo andarino,

con cada paso, hacemos camino,

si en cada jornada, nos abrazamos.


Llegan a la meta los caminantes, 

amando, cualquier camino es ligero,

hacer camino, como dos amantes,


sin ser, de lo accesorio prisionero,

caminar como los romeros de antes,

enlazando en cada paso un ¡Te quiero!